miércoles, 10 de abril de 2024

ENTREGA DE PREMIOS

 El pasado 6 de abril tuvo lugar la entrega de premios del Certamen en una abarrotada Asociación de Vecinos. Se acercaron concejales municipales de todos los grupos políticos, algunos de los jurados y público en general.

Juancho lo presentó como es él, un enamorado de la poesía, que nos envolvió en un halo de emoción, belleza, simpatía y sobre todo, acercando a los premiados al público a través de sus escritos y sus preguntas bajo una complicidad llena de magia.

Asimismo Blanca Colás al acordeón y Pepe Lomas guitarra y voz, a través de un viaje por diferentes músicas de distintos países y épocas hicieron de perfecto contrapunto a la lectura de los poemas. 

Y como no los premiados, los verdaderos protagonistas, que nos leyeron sus magníficas poesías y nos contagiaron con su naturalidad y sinceridad.

A continuación algunas fotos del acto y sus protagonistas: 

                                                  

  

                                                                 

                                                                            


                                                    
    
                                                                                

                                                                      

  
                                       
                                                                               
                                                                                 

                                                                                                      

                                                            
                                                                                   
                                                                                
                                                                              

                                                                              


                                                                 
                                                                                 

   
                                     




lunes, 8 de abril de 2024

POESÍAS PREMIADAS

      

Categoría Senior - Primer Premio

PLAZO PERENTORIO

Ruth Iglesias Villafáñez - Valladolid

(I)

Hubo un instante,

antes,

respira la espina en el costado

desde afuera,

y se disecciona el pasado.

 

(II)

Medir los ángulos

por la fisura,

desdoblar distancia originaria,

ámbar y torbellino

mientras los pájaros emigran.

 

(III)

Otoñar

olvidando grito y ceguera,

regar boca abierta

de las hojas

para que no quede charco ni duda,

enraizar

mi pecho escrito en sal

 

sobre el hilo

suspendido

en el frío de mis manos.

 

(IV)

Todo se pronuncia

en el profano idioma de los sauces,

repleta de abismo y tierra

si es tacto no pulsado,

indescifrable

en la espalda del río

mi lengua desnuda los higos,

y ofrezco

salvia y fonema

 

gota cromática

empapando tus lirios.

 

(V)

Te prometo

nombrar canto en el verbo,

sentir

casi incorpórea,

curva en el poniente de la rosa.

Nací para ser montaña

de polvo y miel,

así en tu estrofa

 

–melancólica-

 

pertenecer, cuerpo amado,

al viento azul donde te respiro.

 

(VI)

Si fuera musgo

y crecer

sobre ti,

verde susurro entre lluvia

y tierra,

cuando mi aliento

cercano e ingrávido

vibre la curva al primer temblor

del verano.

 

Categoría Senior - Segundo Premio

VENGANZA DE PANDORA

Manuel Laespada Vizcaino - Albacete

Cuídate de buscar en los recuerdos

esos momentos en los que pensabas

que eras feliz, así, como se entiende

lo que hoy entiendes por felicidad.

El tiempo es como un vaso de ginebra

que se bebe en ayunas

para cambiarle el paso a los insomnios

y a veces la memoria

nos llega en forma de cristales rotos,

nos mira de reojo, sacándonos la lengua

y nos confunde.

Así con los recuerdos;

y ese aroma de antaño que a veces nos asalta

de unas manos de nieve o de un puchero

ahora son de un color azul turquesa

y nos engañan;

tampoco aquellas voces son las mismas

ni esas tardes de lluvia...

si acaso permanecen las mismas golondrinas

y aquella calavera que llamábamos luna

y seguimos temiendo.

Lo difícil, ya ves,

es regresar a pecho descubierto

a territorio gris de los recuerdos

y retornar indemne,

aun siendo similares las bonanzas

jamás son parecidas las nostalgias,

la soledad te espera en el reencuentro

y uno no sabe bien si es que regresa

de un millón de años luz

o de años sombra.

Son los recuerdos oxidados rostros,

cicatrices

a las que hay que temer más que al espejo:

también, en muchos casos,

nos llegan como gritos de esqueletos

y arañan el azogue del silencio;

nos llegan desvirtuados,

al igual que esas lágrimas

que anuncian el dolor

en los ojos mutantes de los cómicos

que las dicta un guión

y sólo son histriónicas mentiras.

Por eso hay que acercarse a los recuerdos

como se acerca uno hasta un cadáver,

sabiendo que en su piel tan fragilísima

cualquier beso o caricia

es ya caricia o beso de un extraño.


Categoría Juvenil - Primer Premio

pretéritos perfectos

Sara García de las Heras (16 años) - Colegio Claret

 

Existen melodías escondidas

que palpitan entre caminos esmeralda.

Quimeras de un tiempo que no es tiempo

disfrazan la quebrada superficie.

 

Ancianas miradas encharcadas

arropan los susurros de la brisa primaveral.

Rememoran con profunda melancolía,

instantes rebosantes de júbilo y frenesí.

 

Los mirlos que bucean los cielos cenicienta,

silencian sus armonías en caudales de plata quemada.

Ecos de sabiduría que emanan

de poemas escritos en pieles agrietadas.


Categoría Juvenil - Segundo Premio

el acabose

Carmen Martínez Narros (17 años)

IES Antonio Machado (Alcala de Henares)

 

Reluce con fulgor, como una perla,

el astro celestial, la blanca estrella.

Su luz alumbra el cielo, alumbra el campo

salpicado de rosas y azucenas;

el pueblo, con sus plazas, sus callejas,

sus casas, patios, fontanas, su iglesia;

también la sombra opaca y apremiante

que escondida en la oscuridad acecha.

La escucho desde mi ventana abierta

abrir sutil e impávida la puerta;

sus pasos lentos, pausados y firmes,

resuenan en el suelo de madera.

Percibo el titileo de mi vela,

la llama temblorosa centellea,

su brillo despacio se desvanece,

al tiempo que la intrusa más se acerca.

Sus pisadas alcanzan la escalera y

me aferro, sin pensar, a una muñeca

con quien compartí juegos infantiles

la que me protegió de las tormentas.

Sonrío con pesar; su fortaleza

no alivia la zozobra de la espera:

en la boca el sabor de la amargura,

y el alma nublado por la tristeza.

Ella se aproxima y los pasos cesan.

Me invade el miedo, la ansiedad, la pena,

la desazón por dejar este mundo

y la angustia por de otro estar más cerca.

La sonrisa en mis labios se congela,

las manos como finas hojas tiemblan,

el corazón en un puño, oprimido,

y los ojos de lágrimas se llenan.

Y sin fulgor ni luz queda la estrella;

las flores sin color, perecederas;

ellas, como mi cuerpo, se marchitan

cuando la eterna Muerte se me lleva.


Categoría Juvenil - Tercer Premio

mi cicatriz

Jimena Marugán Guerra (16 años) - Colegio Claret

 

La oscuridad de la noche, me envuelve.

El viento, me roza con caricias heladas.

Las palabras, resuenan en mi cabeza a una velocidad vertiginosa,

retumban al ritmo de la rutina,

la misma en la que las personas nos consumimos como velas.

El móvil, repleto de mensajes que ignoro.

Mis manos, temblorosas incapaces de teclear nada.

Mi cabeza, a mil revoluciones.

Yo, enfocándome con esmero en los destellos que las estrellas irradian.

Cómo no, mis esfuerzos resultan inútiles y me veo abrumada por la nocturnidad y su silencio.

Es algo que me come por dentro.

Todo se para y me quedo sin aliento,

estallan entonces mi cabeza y sus pensamientos.

Y no soy capaz de detenerlos, tampoco lo intento.

 

Reparo en lo mucho que te quiero,

y en la manera en que me odio por quererte.

Y no quiero despedirme, porque aún me siento segura entre tus brazos,

porque tu calor se siente como ese rayito de sol de invierno.

Y porque sonrío un poquito más cuando estoy a tu lado.

Y aún no puedo,

aún no he descubierto la manera de alejarme, de odiarte.

Pero odio cómo me haces sentir, cómo me haces reír, mucho más cómo me haces llorar.

Odio la manera en la que hablas y te expresas, porque me encanta.

Me hundo en un mar de lágrimas.

Te odio. Y me odio por odiarte.

Pero una cicatriz me dejaste,

y la cicatriz que tengo yo no grita

arde sola, arde sorda y paciente.

La cicatriz que tengo yo no sangra, en su lugar, sangro yo.

 

 Categoría Infantil - Primer Premio

POZO DE LUNA CLARA

Jorge Gómez Orejana (12 años) - CEIP Fray Juan de la Cruz

 

Pozo de luna clara,

agua fresca por la mañana.

Azul río,

azul mar,

azul el cielo sobre el ventanal.

 

Sé que moriré,

a mi vida adiós diré,

pronto me iré,

cuando ocurra, lloraré.

 

Pozo de luna clara,

agua fresca por la mañana.

Azul río,

azul mar,

azul el cielo sobre el ventanal.

 

La garza blanca,

tan serena y pausada,

simplemente moriré

y a la garza adiós diré.

 

Pozo de luna clara,

agua fresca por la mañana.

Azul río,

azul mar,

azul el cielo sobre el ventanal.

 

El canto del ruiseñor

alegra la mañana

y la oropéndola

tiñe el día de esperanza.

El amanecer,

claro y de oro,

el atardecer,

sombrío y de plata.

 

Pozo de luna clara,

agua fresca por la mañana.

Azul río,

azul mar,

azul el cielo sobre el ventanal.

 

Hay algo que me abrasa

pero no es fuego,

me congela

pero no es escarcha.

 

Pozo de luna clara,

agua fresca por la mañana.

Azul río,

azul mar,

azul cielo sobre el ventanal.

 

Al ver

mi reflejo en el agua,

comprendí que la vida

es como una hermosa golondrina.

Comprendí

que la vida es libertad.


Categoría Infantil - Segundo Premio

LOS LIBROS

Marina Manso Pézer (11 años) - CEIP M.M. Concepcionistas

 

Entre las hojas de un libro

busco emoción a diario,

busco nobles y villanos,

hadas, princesas, tiranos.

 

Entre las hojas de un libro

encuentros mundos sin par,

de misterios y aventuras

y no paro de soñar.

 

Mundos donde cada día

es distinto al anterior,

donde cada personaje

pretende ser el mejor.

 

Mundos de intriga, mentiras,

de romances y de amor,

de aventuras futboleras,

de alegrías y dolor.

 

Cada línea, cada historia,

me hacen reír o llorar,

soñar con historias nuevas

y llegar hasta el final.

 

Libros donde te imaginas

vivir un mundo mejor,

sin mentiras y sin guerras,

solo aventuras y amor.


Categoría Infantil -Tercer Premio

deseos

Cloe Legrand Hernández (10 años)

CEIP Fernández Moratín (Madrid)

 

Quiero que mis guantes

cubran tus manos heladas.

Quiero que mis botas

protejan tus pies descalzos.

Quiero que mi pan reciente

calme tu hambre atrasada.

Quiero que mis ojos

alumbren tu camino.

Pero no quiero

que sean solo palabras.

Toma mis guantes, mis botas,

mi pan y mis gafas.


Categoría Infantil - Mención Especial

playa mía

Telma Benito López (10 años) - CEIP M.M. Concepcionistas

 

En la noche más oscura,

vengo a verte playa mía,

tú me quitas la locura

y me llenas de alegría.

 

Cada vez que siento pena,

voy a sentarme en tu arena,

eso quita la tristeza

que me nubla la cabeza.

 

Tú me entiendes playa buena,

pues al fondo del mar gris

allí veo mi alma en pena

ocultada entre la arena.

 

Playa dulce y tan hermosa,

al ser tú tan bondadosa,

ten piedad de mis pecados

como yo con mis amados.


Categoría Infantil - Mención Especial

mi afición

Sandra Manso Pérez (11 años) - CEIP M.M. Concepcionistas

 

Tengo una gran afición

y no lo puedo evitar,

me gusta darle al balón

y lo he dicho de un tirón.

 

Siento una gran emoción

cuando cojo ese juguete corro,

corro y tiro a puerta

y suena como un cohete.

 

Me gusta desde pequeña,

cuando mi primer balón

se convirtió en el juguete

más preciado de mi salón.

 

Poco a poco con el tiempo

crece una gran afición,

me gusta verlo en el campo

sentirlo en el corazón.

 

Lo comparto con mi equipo,

el balón y la pasión,

todas estamos unidas,

nos queremos un motón.

 

Jugamos cada semana

no sin antes entrenar,

que para saber hacerlo

antes hay que practicar.

 

Y entre balón y balón

portería a portería,

demostramos valentía

en cualquier competición.